Esta semana la fotografía corresponde al viaje de este pasado verano por el sudeste asiático, en concreto de la isla de Bali donde pasamos unos primeros días de viaje inolvidables y en los que tuvimos la oportunidad de conocer algunos de los rincones de esta isla en compañía de nuestro buen amigo y guía Wayan. De lo mejor de la isla, la sonrisa y la amabilidad de sus gentes y la belleza incomparable del lugar, un ejemplo de buena simbiosis entre el hombre y la naturaleza.
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| Templo madre de Besakih |
Menuda negocianta estaba hecha esta cría, dos más como ella y salimos de la crisis en un par de meses.
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