Templos de Angkor. Visita a Beng Mealea y Roluos

Preah Ko (Roluos)

La guinda del pastel la dejamos para el final de nuestro viaje. Durante estos dos meses no fueron pocas las personas que encontramos a nuestro paso y que nos hablaron de las maravillas de Angkor haciendo de esta manera que nuestras ansias por conocer tan magnífico lugar fueran creciendo con el paso de los días.

La llegada a Siem Reap fue algo caótica. Esa mañana salimos de Battambang en esta dirección pero en un autobús que parecía más bien un viaje escolar, eran casi todos chavales veinteañeros que parecían estar de excursión. Era un poco extraño y tampoco nos lo aclararon mucho, pues no hablaban nada de inglés.

Nada más entrar en la ciudad de Siem Reap el autobús se detuvo bajando en ese momento el grueso de los jóvenes camboyanos. Nos asaltó la duda de si bajar allí o esperar a llegar a algún lugar que tuviera algún parecido con una parada de bus, además ni siquiera teníamos la certeza de encontrarnos realmente en nuestro punto de destino. Tratamos inútilmente de hacernos entender pero no fue posible, además el bus ya había comenzado a andar, así que decidimos bajar en la siguiente parada, daba igual dónde nos dejara. Así lo hicimos, de manera que en unos veinte minutos nos encontramos en una especie de descampado totalmente desorientados. Pronto se nos acercaros dos conductores de tuk tuk para preguntarnos sobre nuestro destino, pero la verdad es que la impresión no fue muy buena, pues nos llegó ese tufillo de costumbre a los turistas y a sacarles el dinero sin importar el trato, nada que ver con la gente de Battambang o de Kampong Chhnnang... es lo malo de lugares tan atestados de turistas, además, como muy pronto íbamos a descubrir, Pub Street tiene mucho de parecido con lugares como Kao San Road, mucha fiesta y mucho alcohol, y eso se nota en el trato de la gente en relación al turismo.... . Contesté algo airado a esos dos personajillos y salimos andando del lugar, pero a tan sólo unos pasos se acercó un chaval, esta vez mucho más agradable, con el que pactamos un precio bastante más razonable para que nos llevara hasta nuestro hotel.

Teníamos prevista una estancia en Siem Reap de cinco noches con lo que pensamos había tiempo suficiente para poder visitar sin prisa los principales templos del lugar. Gracias a la valiosa información de nuestros queridos y admirados cronistas de viajes teníamos  planeada la ruta a seguir.

Cuando estuvimos preparando los días de Angkor, pensamos en un hotel que tuviera piscina, pues las excursiones empiezan muy temprano en la mañana y sobre las cuatro o cinco de la tarde regresas de nuevo al hotel pudiendo así emplear el tiempo restante en descansar y disfrutar del calorcito, además era el final de nuestro viaje y ¡qué demonios! nos lo merecíamos. Es por esto que tras consultar en Tripadvisor sobre los hoteles disponibles, decidimos alojarnos en el Motherhome Inn y fue un grandísimo acierto.

El Motherhome Inn se encuentra situado al norte de la ciudad, pegado a la ruta nacional 6 que te lleva hasta el aeropuerto y cerca del Palacio Real. Está muy próximo a un par de cajeros, a un centro comercial y una especie de Seven Eleven donde puedes encontrar prácticamente todo lo necesario, y también hay una gasolinera a unos metros con una tiendita donde hacen unos pasteles muy buenos.

En cuanto a las instalaciones, el hotel cuenta con unas habitaciones enormes y totalmente equipadas, con wifi gratis que va más que aceptable, una piscina en el centro pequeña pero muy limpia con tumbonas y sombrillas, un bar en la misma piscina y un restaurante de los mejores de Siem Reap y a precios muy económicos. Si preguntáis por un centro de masaje camboyano que sea bueno en la ciudad, veréis que te envían al que hay dentro del mismo hotel, nosotros terminamos más de una jornada de templos con masajes de aceite de una hora por cuatro dólares, solamente es necesario reservar en recepción.

Tomando el Boulevar Sivatha, la principal avenida comercial, te plantas en unos pocos minutos caminando en la zona de Pub Street anunciada con enormes neones de color rojo. Alrededor de una manzana tienes todo tipo de lugares para comer, beber, bailar o simplemente tomar un helado en una terraza. Embedido en medio de toda esta vorágine de bares, centros de masaje a pie de calle, pubs o discos, se encuentra el Old Market, un mercado nocturno que bien merece la pena una relajada visita acabada la cena.

Aquí dejo un video de youtube en el que se puede ver como es Pub Street de día y también de noche.

En la misma recepción del hotel tienes toda la información necesaria para visitar Angkor y los alrededores, hay distintos circuitos y se pueden hacer las combinaciones necesarias según lo que se desee visitar y la forma de hacerlo. Se puede contratar la visita en coche individual, en van o en tuk tuk, o simplemente tomar una de las bicicletas disponibles en el hotel y recorrer la zona por tu cuenta.

Los precios varían según el itinerario y el medio de transporte elegido. Los precios para los diferentes circuitos y haciendo la visita en tuk tuk eran los mismos que habíamos traído en nuestros apuntes viajeros y los chavales que hacían las visitas hablaban inglés y parecían de lo más serviciales, así que no nos complicamos mucho y decidimos hacer las visitas a Angkor con el servicio de tuk tuk que nos ofrecía nuestro hotel. Para la mañana siguiente decidimos visitar Beng Mealea y los pequeños templos de Roluos.

Salimos a las 7 de la mañana para visitar Beng Mealea, con una parada inicial en la oficina de turismo para sacar las entradas a los templos de Angkor. Elegimos el pase de tres días válido para una semana que tiene un precio de 40$ por persona y que hay que pagar en efectivo, ya que no aceptan tarjeta de crédito.

Beng Mealea es de los templos más alejados de Siem Reap, a una distancia de unos 65 kilómetros por la carretera nacional 6, hecho que nos hizo plantearnos las dos horas de camino en tuk tuk hasta allí y las dos de vuelta, sin embargo, el trayecto hasta el templo pasó en un suspiro, siendo ésta una de las mejores experiencias de estos días en Siem Reap, gracias a la gente que encontramos a la orilla de la calzada vendiendo en  pequeños puestos de fruta, fabricando artesanalmente el famoso bambú cake, las "gasolineras" siempre a punto para el tuk tuk y los niños, sobretodo esos niños que no paraban de sonreír y saludarnos al pasar a su lado.

Cerca de la pasarela que da acceso al templo, hay una oficina donde es necesario pagar una entrada de 5$ para poder entrar, no está incluido dentro de los templos que se pueden ver en Angkor con la entrada de tres días.

Haciendo en Bambú Cake

El templo de Beng Mealea fue construido por Suryavarman II y es fiel reflejo de los templos de Angkor. Estar en este lugar es lo más parecido a protagonizar una película de Indiana Jones. Las piedras del templo aparecen desperdigadas por la selva y tapizadas de musgo y líquenes que le dan un color verde brillante muy bonito. La selva se ha comido el templo, sus paredes están totalmente enmarañadas por las ramas de los árboles, las enredaderas y las enormes hiedras. Es posible meterte dentro de lo más profundo del templo e inspeccionar cada uno de los recovecos del lugar, siempre ayudado por uno de los muchos vigilantes quién por un par de dólares te llevará a recorrer las entrañas del templo.

Beng Mealea

De vuelta por la nacional 6 llegamos hasta la zona de Roluos, a unos 13 kilómetros de Siem Reap. Los templos de Preah Ko y el mayor de ello de nombre Bakong, son unos de los primeros grandes templos de piedra construidos por los jemeres y constituyen el nacimiento del arte clásico camboyano (parafraseando a la lonely). Es mejor ver primero estos dos templos y dejar para luego el resto de Angkor consiguiendo así apreciar en una mayor medida la evolución en su arquitectura.

Camino a Roluos

Camino a Roluos (con el móvil)

Entrada a Preah Ko (móvil)

Preah Ko (móvil)

El templo de Preah Ko corresponde a la época de las primeras construcciones de ladrillo, está formado por seis torres de ladrillo decoradas de arenisca labrada y relieves de escayola. Fue edificado en el siglo IX y cuenta con algunos de los relieves en escayola jemer mejores conservados.

Bakong al fondo

Bakong

Bakong, dedicedo al dios Shive, es uno de los primeros grandes templos de Angkor, está formado por una gran pirámide central de arenisca de cinco plantas, rodeada por ocho torres de arenisca y ladrillo.

Os dejo un par de estupendas guías que me ayudaron mucho en la preparación de mi ruta por Camboya durante este pasado verano.



Guía de Camboya En el camino con Moonflower.

El Reino de Camboya Miguel en ruta.